lunes, 13 de octubre de 2008

La leyenda de una lágrima

Hoy dejo 2 temas de rap, pero sin ser exactamente rap.
La verdad, me gusta cuando oigo cosas como las que voy a poner, que se salen de lo típico pero que son buenas ideas, y me gusta imaginarme el curre que tiene que haber detrás de la letra.

Batto - La leyenda de una lágrima


Cuenta la leyenda, que en medio de estos días de violencia, melancolía y caos, nació en el lugar menos pensado una lágrima, tan brillante que deslumbró al Sol. Éste, enfurecido, celoso y cegado, se acercó a la lágrima y le dijo con toda su prepotencia:

- ¿Cómo es posible que algo tan pequeño e insignificante como tú, se atreva a brillar mas que yo?

A lo que la lágrima respondió:

- Puede que deslumbre, o que humedezca el párpado,
pero al fin y al cabo nací del tártaro.
Soy la lágrima del vándalo, del delincuente,
que vive sin futuro y nació con el castigo de un presente.
Soy la lágrima del arma cargada que sabe
que solo vino al mundo para causar muerte.
Detente, soy el ente del que siente el impacto inminente
de aquel que le miente y por el que siempre fue fiel.
Soy la lágrima del que no puede volver a su hogar
y del que no puede escapar de él.
Soy el llanto que rodea a un alcohólico
cuyo alcohol se transforma en hiel, dulzura amarga.

Soy el fruto de la inocencia de un niño
que mata por unas zapatillas de marca.

Soy la llaga de un país asolado por las plagas.
La ansiada fragancia del dolar y el euro que al mundo embriaga.
Soy la lágrima de una niña pequeña cuyo padre levanta la falda y arranca las bragas.
Nadie quiso saberlo, frustrante.
Soy producto del elegante narcotraficante que nunca quiso llegar a serlo.
Soy las lágrimas del cielo que hacen ácido este infierno.
Soy el reflejo maldito y continuo del antiguo mito de Narciso y ego.
Soy las lágrimas del gueto; el niño que crece sin muñecos
con manos sucias y pies descalzos;
el odio del que busca el respeto y mil abrazos a balazos.
Soy el recuerdo del último paso de un tretrapléjico;
el trágico caso de un bebé sin padres transformado en verso.
Soy la nostalgia del último beso.
Y si mi brillo es tan intenso
es porque soy la lágrima de Batto, del mundo, y del universo.

Ante esta respuesta tan cruda y sincera, el Sol no puedo hacer otra cosa que tragarse sus palabras, y volver a su lugar en la cúpula celeste. La lágrima siguió su camino, pero era tan hermosa que todos los diamantes del mundo sintieron envidia. Se acercaron y le dijeron con toda su prepotencia:

- ¿Cómo es posible que algo tan poco valioso como tu, se atreva a intentar superarnos en belleza?

A lo que la lágrima respondió:

- Puede que sea bella, pero mi origen no es bonito.
Nací del eterno trauma del odio infinito de la jaula
que ahoga el sonido de los gritos de la violencia en las aulas;
de los hijos del delito del exilio.
Soy la familia de un proscrito, la causa de un suicidio.
Me conociste al ver la muerte de tu hijo grabada en vídeo.
Soy la lágrima del ferviente creyente que de repente perdió la fe.
De los chicos de barrio que viven sin calendario
en los parques, en los bancos, con la botella en los pies,
y veinte pavos de hachís en la cartera.
Soy el ángel sin alas que nunca vuela;
el inmigrante que vino en patera para huir de la pobreza
Soy la lágrima de mil princesas
que vieron morir sus sueños en las aceras de Montera.
Soy la secuela de una dictadura, el desaparecido y su huella.
No soy la droga, soy la necesidad de ella, la amargura.
Soy la lágrima de un mundo crudo, no suavizado en prosopopeya.
Soy aquel amor perdido que recuerdas con una fecha;
la lucha contra una vida entera de desdichas.
Soy la pasta que te engancha, cuatro paredes que se estrechan.
Soy la lágrima, por 192 ánimas que volaron en Atocha;
el corazón ardiente que se cubre con la escarcha.
Soy el dolor del enfermo mental al que nadie ama,
sin noches en la calle o noches en la cama, pensativo,
donde el sonido de tus latidos rompe el vilo de la calma.
Soy hija del hastío, que mezcla el ayer con hoy y los confunde con mañana, y te hace dudar si existes.
Soy aquel inocente al que la ley embiste;
los padres que perdiste;
el llanto de una familia,
y si me tenéis envidia es porque mi belleza es la belleza de los tristes.

Los diamantes dejaron que la lágrima siguiese su camino, y ésta cayó, y cayó, y cayó, hasta que impactó sobre el folio de este cuento y así murió. Y tanto los diamantes como el Sol quisieron llorar su pérdida, pero ya no quedaban lágrimas.


Black Bee - 8ª Introducción


Voy a engañar a Dios para que crea,
que mi reloj de arena se ha agotado,
y es hora de morir e ir a tu lado,
mientras mi voz tu nombre deletrea.
Voy a engañar al rey de la marea,
para que ponga en mi ojos de ahogado,
y azote mi velero acantilado,
hundiéndolo y la vida no lo vea.
La muerte con los vivos no bromea,
la voy a hacer reír a ojos hinchados,
y alegre me dirá como rodea,
tu cuerpo con su línea de soldados.

Hoy que el ayer me llama derrotado,
no siento ni el gemido, ni la herida,
todo me huele a tierra prometida,
al no encontrar las trampas del pasado.
Hoy que el dolor ya ha muerto y acabado,
parece que se va de despedida,
juega mi alma y ríe sorprendida,
sabiendo que ya todo ha terminado.
Hoy alza al fin mi corazón su vuelo,
con otro amanecer en la mirada,
contra la eternidad hoy me revelo,
sereno ya mi paz recomenzada,
olvidará batalla en campo, duelo,
y hasta tu propia voz queda olvidada.


Olvido tan caníbal me has mirado,
que me he vuelto inmortal por devorarte,
yo no nací dolor para saciarte,
y hambriento estás mirando mi costado.
En unos sueños muertos me has buscado,
y yo andaba allí ni en otra parte,
vas a buscar dolor hasta cansarte,
y al fin comprenderás que te he enterrado.
Dile al odio dolor si ha señalado,
mi cuello cada noche como antes,
dile que sigo vivo, que ha fallado,
que ahora tengo la piel de los gigantes,
y hazle saber dolor que me he marchado,
a la muerte a vivir con contrincantes.

En realidad entran mas casi en el marco de poesía clásica, sobretodo esta última de Black Bee. Pero seguro que mas de uno de los que piense que los que hacen rap solo dicen tonterías, con esto se tengan que callar. En fin, recomiendo volverlas a escuchar mas de una vez, porque, aunque la transcripción ayuda, con la primera escucha no se aprecian del todo.